VIOLENCIA EN EL DEPORTE Y POSIBLES SOLUCIONES
Los adultos:
Este punto lo he vivido en primera
persona ya que me gusta el fútbol y he jugado bastantes años y sigo yendo
siempre que puedo a ver partidos a los campos de fútbol, sin importar la
categoría.
Cuando jugaba a fútbol he tenido
padres de jugadores de mi propio equipo como de los equipos contrarios que
incitaban a la violencia. Desde mi punto de vista, en categorías inferiores son
más violentos los padres que los propios jugadores. Los padres a menudo
insultan al árbitro o incluso a mi me han llegado a insultar padres del equipo
contrario. Esto no ayuda ya que produce que haya más tensión sobre el terreno
de juego y también e podido comprobar que este tipo de insultos han producido
que se peguen los jugadores por defender a los padres.
Desde muy pequeños los padres ejercen
una presión sobre los propios hijos que no es buena y los padres parece que no
entiendan que los niños se tienen que divertir y no competir, pero ellos acaban
insultando a árbitros, a otros padres… Si los niños ven este comportamiento
desde bien pequeños lo más normal es que piensen que es lo común en un campo de
fútbol y probablemente hará que los niños se conviertan en violentos en un
futuro.
Así pues, los padres deberían de estar
bien concienciados de que su actitud marcará la de sus hijos y la de la resta
de los niños. Los padres deben de ser un ejemplo de comportamiento para los
niños, pero a día de hoy y habiéndolo comprobado en primera persona, esto aún
no se ha conseguido.
Artículo:
El sábado fue un joven árbitro de 16
años la víctima, pero son muchos los casos que se dan en España por culpa de
unos padres con alma de 'hooligans'
La salvaje agresión del padre de un jugador prebenjamín (enlace) a un colegiado de 16 años de León ha generado una gran alarma social. Un menor de origen argelino que acabó en un centro hospitalario al sufrir contusiones en cara, abdomen y pecho. Lamentable agresión de un progenitor, ante la mirada de su pequeño, que ya ha sido identificado por la Policía Nacional. El problema no es puntual, por desgracia, y sí muy extendido en nuestro país.
El Confidencial.
Y lo peor de todo, es que estas noticias son más comunes de lo que parece.
Propuestas para acabar con la violencia en el fútbol:
·Educación,
como primera base.
·Buscar
la igualdad entre los grupos.
·Situaciones
de empatía, donde cada uno pueda ocupar el lugar del otro.
·No
ridiculizar siempre al más torpe.
·No
utilizar siempre al mismo para dar ejemplo.
·Cambiar
de grupos o parejas constantemente.
·Regañar
a aquel que discrimine a sus compañeros...
Además:
Los entrenadores, directivos, atletas,
profesionales de los medios de comunicación, árbitros y policías deberían
participar en sesiones de trabajo sobre agresión y violencia para asegurar qué
se entiende por agresión, cuál es el coste de los actos agresivos, y cómo estos
pueden ser controlados.
Por otra parte, se debería de expulsar
a los padres que incitan a la violencia, ya que son los principales causantes
de que los niños se conviertan en violentos.
Además, que formaran bien a los
entrenadores en este aspecto y si hay algún tipo de conducta que incite a la
violencia que el árbitro lo refleje en el acta y que estos entrenadores estén
suspendidos unos meses.
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